La Federación Española de Daño Cerebral (FEDACE) y Cermi Comunidad de Madrid reclaman al Ministerio de Sanidad, al Consejo Interterritorial de Salud y a la Comisión de Salud Pública la inclusión del colectivo de personas con discapacidad dentro del grupo de alto riesgo para enfermedad grave por COVID-19 que se vacunará de forma simultánea al grupo de edad de 70 a 79 años.
Según datos oficiales, en España viven más de 420.000 personas con Daño Cerebral. El 78% de los casos tienen su origen en un ictus y el 22% restante en traumatismos craneoencefálicos y otras causas. Este colectivo presenta una gran vulnerabilidad frente a la COVID-19 por la elevada variedad de secuelas del daño cerebral y por la presencia de pluripatologías asociadas a las mismas.
Además, el miedo al contagio está causando que muchas personas dejen de acudir a los centros de atención, con el consiguiente deterioro en el mantenimiento de capacidades y retroceso en su rehabilitación e inclusión social -lo que a su vez retroalimenta la apatía, depresión, falta de motivación, y otras secuelas comunes en el daño cerebral-.
Por este motivo, FEDACE y su Movimiento Asociativo de Daño Cerebral -compuesto por 46 entidades miembro de todos los puntos del país- demanda que se incluya como colectivos prioritarios dentro del Plan de Vacunación tanto a las personas con Daño Cerebral (sin tener en consideración su grado de dependencia), como a sus personas cuidadoras.
Es imprescindible tener en cuenta, como se ha hecho, a las personas cuidadoras formales trabajadoras en los centros de atención; pero también es prioritaria la vacunación de las personas cuidadoras informales (fundamentalmente familiares de las personas con Daño Cerebral). Es la única manera de conseguir que las personas con daño cerebral se mantengan siempre en espacios seguros, tanto en los centros como en sus hogares.
Fuentes: FEDACE y Cermi Madrid